Es la capacidad para identificar, entender y manejar las emociones
correctamente, de un modo que facilite las relaciones con los demás, la
consecución de metas y objetivos, el manejo del estrés o la superación de
obstáculos.
Ante cualquier acontecimiento que suceda en tu vida, las emociones, tanto
positivas como negativas, van a estar ahí, y pueden servirte de ayuda y hacerte
feliz o hundirte en el dolor más absoluto, según cómo sea tu capacidad para
manejarlas.
Las personas con una alta inteligencia emocional no necesariamente tienen
menos emociones negativas, sino que, cuando aparecen, saben manejarlas mejor.
Tienen también una mayor capacidad para identificarlas y saber qué es
exactamente lo que están sintiendo y también una alta capacidad para
identificar qué sienten los demás. Al identificar y entender mejor las
emociones, son capaces de utilizarlas para relacionarse mejor con los demás,
tener más éxito en su trabajo y llevar vidas más satisfactorias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario